Análisis Bíblico
14 de diciembre de 2025
Levítico 19

Levítico 19

Santos seréis, porque santo soy yo Jehová vuestro Dios.

Capítulo Completo

1 Habló Jehová a Moisés, diciendo:

2 Habla a toda la congregación de los hijos de Israel, y diles: Santos seréis, porque santo soy yo Jehová vuestro Dios.

3 Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis días de reposo guardaréis. Yo Jehová vuestro Dios.

4 No os volveréis a los ídolos, ni haréis para vosotros dioses de fundición. Yo Jehová vuestro Dios.

5 Y cuando ofreciereis sacrificio de ofrenda de paz a Jehová, ofrecedlo de tal manera que seáis aceptos.

6 Será comido el día que lo ofreciereis, y el día siguiente; y lo que quedare para el tercer día, será quemado en el fuego.

7 Y si se comiere el día tercero, será abominación; no será acepto,

8 y el que lo comiere llevará su delito, por cuanto profanó lo santo de Jehová; y la tal persona será cortada de su pueblo.

9 Cuando siegues la mies de tu tierra, no segarás hasta el último rincón de ella, ni espigarás tu tierra segada.

10 Y no rebuscarás tu viña, ni recogerás el fruto caído de tu viña; para el pobre y para el extranjero lo dejarás. Yo Jehová vuestro Dios.

11 No hurtaréis, y no engañaréis ni mentiréis el uno al otro.

12 Y no juraréis falsamente por mi nombre, profanando así el nombre de tu Dios. Yo Jehová.

13 No oprimirás a tu prójimo, ni le robarás. No retendrás el salario del jornalero en tu casa hasta la mañana.

14 No maldecirás al sordo, y delante del ciego no pondrás tropiezo, sino que tendrás temor de tu Dios. Yo Jehová.

15 No harás injusticia en el juicio, ni favoreciendo al pobre ni complaciendo al grande; con justicia juzgarás a tu prójimo.

16 No andarás chismeando entre tu pueblo. No atentarás contra la vida de tu prójimo. Yo Jehová.

17 No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado.

18 No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová.

19 Mis estatutos guardarás. No harás ayuntar tu ganado con animales de otra especie; tu campo no sembrarás con mezcla de semillas, y no te pondrás vestidos con mezcla de hilos.

20 Si un hombre yaciere con una mujer que fuere sierva desposada con alguno, y no estuviere rescatada, ni le hubiere sido dada libertad, ambos serán azotados; no morirán, por cuanto ella no es libre.

21 Y él traerá a Jehová, a la puerta del tabernáculo de reunión, un carnero en expiación por su culpa.

22 Y con el carnero de la expiación lo reconciliará el sacerdote delante de Jehová, por su pecado que cometió; y se le perdonará su pecado que ha cometido.

23 Y cuando entréis en la tierra, y plantéis toda clase de árboles frutales, consideraréis como incircunciso lo primero de su fruto; tres años os será incircunciso; su fruto no se comerá.

24 Y el cuarto año todo su fruto será consagrado en alabanzas a Jehová.

25 Mas al quinto año comeréis el fruto de él, para que os haga crecer su fruto. Yo Jehová vuestro Dios.

26 No comeréis cosa alguna con sangre. No seréis agoreros, ni adivinos.

27 No haréis tonsura en vuestras cabezas, ni dañaréis la punta de vuestra barba.

28 Y no haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal alguna. Yo Jehová.

29 No contaminarás a tu hija haciéndola fornicar, para que no se prostituya la tierra y se llene de maldad.

30 Mis días de reposo guardaréis, y mi santuario tendréis en reverencia. Yo Jehová.

31 No os volváis a los encantadores ni a los adivinos; no los consultéis, contaminándoos con ellos. Yo Jehová vuestro Dios.

32 Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor. Yo Jehová.

33 Cuando el extranjero morare con vosotros en vuestra tierra, no le oprimiréis.

34 Como a un natural de vosotros tendréis al extranjero que more entre vosotros, y lo amarás como a ti mismo; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto. Yo Jehová vuestro Dios.

35 No hagáis injusticia en juicio, en medida de tierra, en peso ni en otra medida.

36 Balanzas justas, pesas justas y medidas justas tendréis. Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto.

37 Guardad, pues, todos mis estatutos y todas mis ordenanzas, y ponedlos por obra. Yo Jehová.

Análisis Bíblico

Especificaciones teológicas

Dios establece normas de santidad, justicia y amor para su pueblo, enfatizando la importancia del respeto por los padres, la integridad personal, la justicia social y el amor al prójimo como reflejo de su propia naturaleza. \n

Contexto hermenéutico

El capítulo se encuentra dentro de la Ley mosaica, dada a Israel como guía para su vida y relación con Dios, buscando establecer una sociedad justa y santa, en un contexto de transición entre la esclavitud en Egipto y la entrada a la tierra prometida, con un énfasis en la santidad como fundamento de la vida en comunión con Dios. \n

Síntesis bíblica

Levítico 19 presenta un llamado a vivir una vida de santidad, justicia y amor, reflejando la naturaleza de Dios y promoviendo una sociedad justa y armoniosa, enfatizando la importancia de la integridad personal y la responsabilidad social en la vida del creyente.

Interpretación

El capítulo 19 de Levítico es un llamado a la santidad y a vivir en rectitud. Dios instruye a su pueblo, Israel, sobre cómo deben comportarse en su vida diaria, resaltando la importancia de la justicia, la honestidad y el amor al prójimo. Se enfatiza que ser santo implica vivir de acuerdo a los mandamientos de Dios y tratar a los demás con respeto y dignidad. Este capítulo es un recordatorio de que la vida espiritual debe reflejarse en acciones concretas en la vida cotidiana.

Significados

  • Llamado a la Santidad: El capítulo comienza con la exhortación a ser santos, ya que Dios es santo. Esto nos recuerda que la santidad no es solo un estado, sino una práctica diaria en nuestras relaciones y acciones.
  • Relaciones familiares: La importancia de honrar a los padres y guardar el día de reposo está enraizada en el respeto y la reverencia a Dios.
  • Prohibiciones sobre ídolos: Se prohíbe la idolatría, lo que refleja la necesidad de tener una relación pura con Dios y no dejarse llevar por las influencias externas.
  • Responsabilidad social: Las instrucciones sobre cómo cosechar y dejar parte de la cosecha para los pobres son un llamado a la generosidad y a cuidar del necesitado.
  • Justicia y honestidad: Se enfatiza la importancia de no robar, no mentir y ser justos en los juicios, lo que establece un principio ético fundamental en la comunidad.
  • Amor al prójimo: La famosa exhortación de amar al prójimo como a uno mismo es central y muestra que el amor debe ser la base de todas las interacciones humanas.
  • Rituales y sacrificios: Las instrucciones sobre los sacrificios y ofrendas indican la importancia de acercarse a Dios con un corazón limpio y en el momento adecuado.
  • Cuidado con lo que se consume: Las prohibiciones sobre la sangre y las prácticas paganas reflejan la necesidad de mantener la pureza espiritual y física.
  • Trato al extranjero: La inclusión del extranjero y el llamado a amar al forastero destacan la importancia de la hospitalidad y el amor hacia todos, recordando su propia historia de opresión en Egipto.

Aplicación a la vida diaria

  • Honra a tus padres: En tu vida diaria, busca maneras de mostrar respeto y amor a tus padres y ancianos. Esto puede ser a través de una llamada telefónica, una visita o simplemente escuchándolos.
  • Generosidad: Practica dejar algo para los menos afortunados, ya sea en tu trabajo o en tu comunidad. Puedes donar alimentos o ayudar a alguien que lo necesite.
  • Práctica de la Justicia: En situaciones cotidianas, asegúrate de ser honesto en tus tratos. No engañes ni mientas, y si trabajas en un lugar donde se toman decisiones, aboga por la justicia, sin importar a quién favorezca.
  • Amor al prójimo: Haz un esfuerzo consciente por ayudar a los demás. Esto puede ser tan simple como ser amable, ofrecer una palabra de aliento o ayudar con una tarea.
  • Evita la idolatría: Reflexiona sobre lo que puede estar ocupando el lugar de Dios en tu vida. Puede ser el trabajo, el dinero o incluso las relaciones. Asegúrate de que tu enfoque principal sea tu relación con Dios.
  • Cuidado con lo que consumes: Mantén un estilo de vida que honre a Dios, tanto en lo que comes como en lo que ves o escuchas. Esto incluye cuidar de tu salud física y espiritual.
  • Hospitalidad: Sé acogedor con aquellos que son diferentes a ti. Puedes invitar a alguien de una cultura distinta a compartir una comida o aprender sobre sus costumbres.
  • Justicia en tu comunidad: Si ves injusticias, no te quedes callado. Actúa y habla en favor de aquellos que no tienen voz, fomentando un ambiente de equidad y respeto.

Ideas principales del capítulo

  • 1

    No hurtaréis, y no engañaréis ni mentiréis el uno al otro.

  • 2

    Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

  • 3

    No harás injusticia en el juicio.

Preguntas para reflexión

  1. 1

    ¿Cómo puedo reflejar la santidad de Dios en mi vida diaria?

  2. 2

    ¿De qué manera trato a los demás en mi comunidad?

Palabras clave:

santidad justicia amor respeto

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